domingo, 22 de abril de 2007

PELIGROS DE LOS MENSAJES DE TEXTOS EN NIÑOS


Los mensajes de texto y la trasgresion lingüística en los adolescentes



Por Maria Rondón



Con la aparición, en Venezuela, de los sistemas digitales (telefonía de segunda generación, 2G), los terminales disponen de la capacidad de enviar y recibir mensajes cortos de texto (SMS), que operan de manera muy similar a los mensajes de correo electrónico en Internet, aunque especificando como destinatario un número de Terminal y no un identificador de usuario. Esto ha tendido gran aceptación entre los usuarios de la red telefónica. Con la aparición de los sistemas 2,5G y 3G se han implantado los servicios cada vez más sofisticados que se hacen más atractivos especialmente entre la población de niños y adolescentes quienes ya poseen celulares desde muy temprana edad. Las virtudes de los celulares son ilimitadas, y se puede observar esto, en la descripción que se hace de las nuevas tecnologías celulares por parte de Emerson Whitaker (2005) en su libro: La tecnología celular del nuevo milenio P.382

EMS (Enhanced Messaging Service) y MMS (Multimedia Message Service), que ofrecen mejoras en el servicio SMS básico sobre texto; así, admiten texto de dimensiones ilimitadas, inclusión de imágenes, melodías y animaciones y, en el caso del MMS, posibilitan el envío y recepción de todo tipo de elementos multimedia, incluidos vídeos. Para utilizar EMS y MMS se requiere, respectivamente, de terminales de telefonía móvil GPRS y UMTS u otro 3G.



El mercado de los teléfonos celulares en Venezuela, destinado al principio a captar usuarios adultos y de alto poder adquisitivo, se ha visto en la necesidad de diversificar sus estrategias y productos al determinar que sus equipos estaban destinados a todo tipo de público, incluso a los infantes. Hoy en día es común ver a niños y jóvenes con esos aparatos en las escuelas. Su proliferación ha traído problemas a los maestros, quienes en ocasiones han tenido que enfrentarse a los padres, que son quienes fomentan el uso de los equipos para mantenerse en contacto con los pequeños. Lenguaje que se utiliza en los mensajes enviados por celulares esta tan trillado, que ya aparece mención a los mensajes de textos celulares en pasajes de novelas de reciente edición. La literatura no hace más que reflejar la vida misma y a nadie puede extrañarle la masificación de mensajes de textos a partir también del uso cada vez mayor de celulares. Sin embargo se observa que el uso de los mensajes de texto se extiende ya a un problema no solo lingüístico sino también social como lo menciona Dayanara Suárez Armoina (2006) en su artículo titulado: El celular amo de la palabra. P, 1.

Es un fenómeno lingüístico y social que se ve reflejado en la vida cotidiana y en el aula de clase pero que seguramente a más de un lingüista le ha traído un dolor de cabeza. En los mensajes de texto o SMS (Short Message Service, en inglés, o servicio de mensaje corto) se suele abreviar palabras y muchas veces se escriben letras pensando sólo en la fonética que ayuda a descifrar el mensaje, por ejemplo: "a1que" (aunque), "xq"(por qué), "salu2"(saludos); y así infinidad de abreviaturas, y hasta la consolidación de un código -sobre la base de abreviar las palabras-, para conseguir introducir el máximo de información en los 160 caracteres que usualmente permite la pantalla del celular. En la creación de este código mucho tienen que ver las generaciones más jóvenes.



Cada 90 segundos se envía un millón de SMS en todo el mundo, con un lenguaje universal aseguró Miguel Udaondo, director de Relaciones Corporativas de Vodafone España.
Howard Rheingold (2005), experto en el tema de las implicaciones sociales de la tecnología, en su obra En Cometarios SMS P, 2 Señala que el uso de los mensajes de texto por los adolescentes se debe a que:

"Para los jóvenes es esencial estar todo el tiempo en contacto con su grupo social inmediato; además, el SMS es una forma sencilla de hacer contactos informales con potenciales compañeros de salidas. En el SMS los padres y profesores no son intermediarios de las comunicaciones".

Aunque también, el precio es una variable para los más jóvenes acortar las palabras y enviar un mensaje de texto resulta mucho más barato que establecer una comunicación de voz. Por abaratar costos, por estar en contacto, la cuestión es que este nuevo código de comunicación entre los jóvenes ya cuenta hasta con un diccionario de mensajes de celulares.
En su trabajo Códigos de los adolescentes P, 23, el periodista Eduardo San Pedro (2002), sostiene que:

“siempre hubo códigos en el mundo: sin ir más lejos, el lunfardo y el 'vesre' o el slang americano. Lo que no implica de ningún modo que quien los conoce no hable y escriba correctamente en su idioma. Por lo demás, la adolescencia siempre tuvo códigos para diferenciarse, desde la vestimenta hasta —precisamente— el lenguaje. Ahora se suma otra razón de peso: comunicarse así es barato".


Para el investigador este tipo de comunicación no produciría tanto cambio o deterioro de la lengua. Pero es esto realmente cierto, pueden los jóvenes realmente discriminar cuando y como hablar o escribir de una forma u otra.
Es alarmante la problemática de las carencias escritúrales de los alumnos y preocupa enormemente, que el uso de estos mensajes sin limitaciones ortográficas puede influir en el incremento de esta anomalía. El segmento que mayor uso le da al SMS es el de los jóvenes. Es grande el número de los alumnos de esta institución como tantas otras, que envían y reciben SMS en forma habitual. La popularidad entre los adolescentes de estos mensajes carentes de normas ortográficas, nos lleva a plantearnos la necesidad de un estudio sobre este fenómeno social de gran aceptación en los adolescentes. La popularidad entre los adolescentes de nuestro país de estos mensajes de texto, nos lleva a plantearnos la necesidad de un estudio sobre este fenómeno social y comunicacional de gran aceptación en los adolescentes.

No hay comentarios: